Discurso de Claudio en Honor al Tio Tulio
Bueno había que estar a tono con las fiestas y Claudio accedió a un deseo incumplido de toda la vida del Tio Tulio, que era verlo vestido de huaso..y se lo cumplió finalmente.. aquí esta la prueba..
El Discurso de Claudio
CUMPLEAÑOS TIO TULIO.
“Señora Emelina…Don Artemón…Sálvenme les digo…” El eco de un grito desgarrador se oye todavía en aquel valle fértil e indómito.
Se había parado de su eventual asiento, para entregar su pequeño aporte al acto convocado.
Aun recuerdo aquello como si fuera hoy.
Por supuesto, sorprendió a su cercana audiencia y no es la primera vez. Con motivo del primer encuentro en Buin, que hace muy poco tuve la oportunidad de ver a través de las imágenes gravadas por un joven camarógrafo, donde se observa a mi padre intervenir con su habitual ímpetu y con su potente voz, entregando sin preparación sabias palabras a sus oyentes.
Ese es mi Padre que hoy se moviliza con un bastón diariamente entre su casa y su lugar de trabajo. Si supieran que su principal impedimento es su fragmentada rodilla derecha, aquella que le ayudó a eludir sobre pastos y tierras a cuanto rival se le pusiera en su camino. Así es también el con los obstáculos de la vida.
Pero ahora remontémonos unos ochenta y cuatro años atrás, corría el año 1924 un casi primaveral 16 de Septiembre. Lugar de nacimiento: su casa, en algún dormitorio de aquella casa esquina del pueblo de Lumaco a orillas del Rapaco. Su primer llanto, potente seguramente, fue el acontecimiento del día y motivos de celebración. Nacía uno de los trece hermanos de la familia de Artemon Parra F. y Emelina Chávez G.
Paso a contar que por aquel tiempo el caserío enclavado en pleno territorio araucano, entre las ciudades de Angol y Temuco. Tenía serpenteantes y polvorientas vías de acceso desde los pueblos de Purén y Traiguén y era paso obligado para continuar a Capitán Pastene. Para llegar había que enfrentar largas horas de viaje entre cerros, bosques, praderas y quebradas. Era habitual el paso de un tren que con su columna de humo avisaba desde lejos su presencia con su pesado rodar. En el viajaba mucha gente en especial familias mapuches con su tradicional vestimenta.
Geográficamente el pueblo es quebrado por dos cauces el río Pichi Lumaco de aguas claras y el río Lumaco de aguas turbias y en ellos se podía pescar y navegar, era normal que en épocas de invierno sus aguas inundaran grandes extensiones de tierras debido a las intensas precipitaciones que se dejaban caer en invierno.
La familia al igual que los vecinos calentaba las aguas y los alimentos mediante cocina a leña, sacaban las aguas de beber del río, de norias o de pequeños pozos, el baño era una pequeña letrina alejada de la casa y las ropas se lavaban en el río.
No se Uds., pero yo que viví también allí siento que estamos hablando de un lugar imaginario, de literatura, ya que hoy acostumbrados a las grandes autopistas y a los Mall, los celulares e internet es difícil encontrar tanto aislamiento y virginidad.
Pero porque les hablo de esto… muchos de los acá presentes me podrán aportar con muchos detalles mas y para ellos representa quizás una simple reseña. Con esto solo quiero explicar a las nuevas generaciones de la gran diferencia que existe con la realidad actual.
Mi padre de pequeño vivió en el entorno descrito jugando con sus hermanos y en ello se destacó por ser uno de los más revoltosos. Sus correrías infantiles le ocasionaron más de algún problema y retos de parte de sus padres.
Estudió su enseñanza básica en la escuelita del pueblo donde se hizo de grandes amigos entre ellos los niños mapuches. Según sus propios dichos dedicarse a los estudios no era su principal preocupación. El como en toda la vida, quería jugar y jugar.
Es enviado a estudiar a un internado de una escuela agrícola a un pueblo llamado Cajón. Estando en ese lugar un día sale a ver a su hermano mayor Manuel al regimiento en Temuco, pero el contingente marcha en campaña a la zona de Padre las Casas. Con tantas ganas de ver a su hermano inicia una carrera que durará horas y horas hasta dar con el grupo de militares, finalmente al verse se abrazan fraternalmente.
Tempranamente tuvo que saber de esfuerzo, siendo muy joven su padre murió de alguna enfermedad que ahora probablemente sería de fácil cura. El padre postrado en su cama solicita la presencia de sus hijos… y levantando su huesuda mano da su última bendición…
Entonces tiene que trabajar para ayudar con el sustento familiar. Es por eso que se emplea bajo el alero de su tío Gumercindo, entonces se hace cargo del funcionamiento de su predio agrícola donde tiene como misión entre otras de llevar el ganado a la feria de Traiguén. Sobre su caballo tiene que arrear los animales durante largos y duros viajes.
No faltó un día en que se le extraviaron algunas vacas por el camino por lo que pasó un gran tiempo sobre su caballo buscándolas, recorriendo y preguntando por los caminos hasta encontrarlas.
Todo el dinero que ganaba, que por supuesto no era mucho, se lo entregaba a su madre, la que lo destinaba entre otros para la compra de víveres y para la educación de hermanos menores.
Posteriormente hace su servicio militar en regimiento de Traiguen donde se destaca por sus habilidades en el manejo de los cañones de artillería y sus capacidades atléticas. En una prueba de maratón corrida en las calles de Valdivia le gana a un destacado corredor nacional llamado Nain que era competidor de Manuel Plaza.
Además, sus compañeros lo hacían boxear presentándole buenos contendores de mayor tamaño que el, pero mi padre no tenia ningún problema en derrotarlos.
Buscando nuevos horizontes y aprovechando su instrucción militar, viaja hasta Santiago donde entra el Servicio de Prisiones.
Sucede que por problemas de otros es castigado por varias semanas donde pasa retenido en el recinto penitenciario. Aprovechando la visita del cardenal José María Caro y el ministro de justicia de la época se presenta ante ellos y en representación del resto se cuadra y explica de la injusta medida aplicada. Gracias a esto se pone fin al castigo pero eso le significa una nueva destinación, el penal de Buin.
Ya aquí por fin en este pueblo conoce a una bella joven que se convierte en su esposa y con ella tiene tres hijos: Tulio, Darío y el que les habla.
De tanto en tanto viaja a ver a su madre a su querido pueblo y cuando llega a la altura del puente sobre el Rapaco lanza su característico grito señalado al inicio de este discurso para anunciar su llegada a casa. Señora Emelina…
Todo en alusión a un lugareño pasado de copas que algunas noches gritaba cuando se caía al Rapaco y pedía el auxilio de los vecinos más cercanos.
Es destacable en este lado que mi padre en uno de sus viajes vuelve a levantar con sus manos la casa caída por el terremoto de 1960.
Aquí en Buin deja el servicio de prisiones para dedicarse a la actividad comercial. La zapatería, suelería y repuestos de bicicletas fueron el rubro escogido para mejorar la situación económica familiar. Al inicio de la aventura fue en compañía de su socio y hermano Ricardo, después con su suegro Julio Pérez y finalmente trabaja solo. Se puede decir que su acometida es plenamente exitosa y logra sus objetivos, es una persona independiente y desarrolla a su voluntad los esfuerzos para encontrar los destinos soñados.
Se pueden mencionar también su incursión en el mundo del deporte donde dedica gran tiempo a levantar junto a su hermano Ricardo y otros el club deportivo de sus amores.
Fue candidato a Regidor por esta comuna y presidente de la asociación de futbol local y además de presidente de la junta de vecinos del barrio donde habita. En este último cargo construye una plaza junto a los vecinos donde el trabajo comunitario es transmitido a todo Chile por televisión.
Como logra todo esto… con lo que aprendió cuando muy joven, sin alternativas y sin mucha educación tuvo que poner su cuero mas duro para soportar trabajos de hombres avezados y sin flaquear llevar el apoyo monetario a su familia.
Pero su principal características no es la descrita recientemente sino que es su propia forma de ser es la que sus familiares y conocidos mas valoran.
Nombrar a Tulio Parra Chávez es nombrar con nombres y apellidos a la vida misma, la que gozamos hasta con los más mínimos detalles. Claro, porque si hay un hombre que da lecciones de cómo vivirla es El.
Su sonrisa, su sociabilidad, su alegría y sus ganas de hacer las cosas son su carta de presentación.
Por eso con este modesto discurso es que vengo en homenajearte y saludarte en el día de tu cumpleaños Nº 84, sin dudar 84 primaveras. Te decimos que eres nuestro ejemplo nuestro guía y nuestro padre amigo, te queremos mucho y que vivas muchos años más.
Tu hijo, Claudio
Buin, 18 de Septiembre de 2008
8 comentarios:
Claudito.
por ahora no me queda mas que felicitarte por tu relato historico y emocionante, pero leo en tus palabras y tus gestos lo que siempre he pensado de ti, una persona cariñosa buen hijo, soñadora y de un un alma bella.
realmente estremecedor, como para leer muchas veces..
te felicito
Claudio, veo que en tus palabras has reprsentado fielmente la esencia de nuestro adorado tío. La luz que emana de él es tremenda y cada vez que el tío está presente esa luz invade los espíritus de quiénes están con él. Podría faclimente ser denominado la Luz imperecedera de los Parra. ndudablemente todos son importantes, cada uno en su especialidad y el su esencia.Sin embargo hay un factor común a ellos y es su gran amor por todos y cada uno de nosotros, los valores que han dirigido sus y nuestras vidas. el tío Tulio se destaca por aquella cracterística que he dicho. Su alegría y esa luz que subyuga a todos. Felicitaciones Claudio por tus palabras. Juan Carlos y Marcela
FE DE ERRATAS
reprsentado = representado
faclimente= fácilmente
ndudablemente= indudablemente
el su esencia= su esencia
cracterística= característica
Sorry, estaba escribendoen una posición inadecuada.
En qué posición prima??
no seas copuchento.
Prima me entendiste mal. Estabas con la mano derecha escribiendo en la parte izquierda del teclado?
jajaja nop.
Te pillaro primi. jajajajajaja!
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